Amélie es una de esas películas que te cambian, de esas que hacen que el cine sea cine y no puro "pasar el rato". Con una historia de amor fuera de lo común -hermosamente extraña- que apela a cualquiera que tenga más de humano que de roca hace que el espectador se conmueva. Con un guión redondo, profundo e innovador es imposible no involucrarse en la historia. No entrar a ese mágico mundo de colores cálidos y música emotiva e hipnotizante , es casi un pecado.
"Son tiempos difíciles para los soñadores"
Entonces cabe preguntarse si una historia tan fantástica y perfecta tiene lugar en la vida real. Es absolutamente comprensible creer que Le fabuleux destin d' Amélie Poulain es pura ficción. Pero, ¿y si no lo fuera? Si existiera algún plan divino para vivir una historia digna de un guión de ciento veinte páginas, ¿qué harías?
Pues yo... yo me dedicaría a cocinar galletas,brownies y bizcochos muy dulces.. así así para tener ese tiempo vital de soledad para pensar, para tener flashbacks imaginarios o imaginar futuros inciertos muy a lo cinema champagne. El olor del azúcar al derretirse, una cuchara al romper la crème brûlée o la sensación que queda en las yemas de los dedos, tras meterlos traviesamente en la masa de un pastel de ciruelas son esos pequeños placeres que, luego, permiten valorar los grandes e inesperados regalos de la vida.
*Ahora que he conseguido varias recetas de algunos de los platos que aparecen en el filme francés, me propongo a prepararlos. Ya los verán ...
"Sans toi, les émotions d'aujourd hui ne seraient que la peau morte des émotions d'autrefois."