He aquí mi tercer blog.
Me parece apropiado dedicar el primer post a una explicación del nacimiento de Sugar, chocolate and frames. Después de un poco más de dos años de estudiar Comunicación Audiovisual, me di cuenta del importante papel de la gastronomía en las películas, series de televisión, videoclips y demás productos audiovisuales. La comida está presente casi siempre. Aparece como elemento de atrezzo, que aporta mayor verosimilitud a lo que vemos, o con un rol mucho más importante, como parte integral del hilo narrativo o como símbolo de las emociones o rasgos de un personaje. No solo llama la atención la forma en la que la gastronomía se integra en el guión, sino también en la estética de lo que vemos a través de una pantalla.
La otra gran razón por la que nace este blog es por la Amélie/ Izzie Stevens que llevo dentro. Mi amor por la cocina empezó hace más o menos un año, cuando la cocina se convirtió en mi terapia anti-stress y poco a poco le fui cogiendo cariño, se convirtió en un pasatiempo, hasta llegar a ser lo que es ahora: un gran placer. ¿Por qué? Cuando cocino me doy el lujo de soñar e imaginar (un poco más de lo normal), esas cosas que se hacen cuando se está solo. Además, me alegra cocinar para el resto personas. Pensar que un pedacito de algo rico puede hacer aparecer un esbozo de sonrisa en otro, it just makes my day .
Por último, ¿han olido la comida cuando se hace ? Creo que esa pregunta se contesta sola...
Por todo esto, la idea que estaba en mi cabeza desde hace unos meses toma un cuerpo virtual en este blog que dará posada a recetas, comentarios y demás "idas de olla" que unan a la gastronomía con los productos audiovisuales.
